Mensajes clave sobre RID

Introducción

En el marco del GIDRM III, se desarrollaron los siguientes mensajes clave el desarrollo basado en el conocimiento del riesgo y se ajustaron según las lecciones aprendidas.

El desarrollo se produce en un entorno caracterizado por la incertidumbre y complejidad de riesgos, al mismo tiempo que las vías de desarrollo actuales están creando nuevos riesgos más rápido de lo que podemos gestionar.

Los pilares del desarrollo sostenible, como los logros en materia de reducción de la pobreza, lucha contra las enfermedades y mejora del acceso a la atención de la salud y la educación, son frágiles y se ven soca-vados por amenazas nuevas y emergentes. Al mismo tiempo, las malas decisiones de desarrollo pueden exacerbar o crear nuevos riesgos. Los desastres tienen impactos en diversos ámbitos como la salud públi-ca, la economía, la gobernanza, el turismo, la infraestructura crítica (por ejemplo, hospitales, transporte, agua, comunicaciones) y pueden tener efectos especialmente devastadores en contextos y entornos ya frágiles. Los desastres pueden acabar con muchos años de logros en materia de desarrollo y reducen las oportunidades de desarrollo de los países. Según el último Informe de Evaluación Global (GAR) de UN-DRR, "la creación de riesgos está superando la reducción de los mismos". En el futuro, salvaguardar los logros del desarrollo y el progreso fomentado por agendas internacionales como los Objetivos de Desa-rrollo Sostenible, el Acuerdo de París o el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres (2015-2030), depende de nuestra comprensión de los riesgos y la integración de las consideraciones de riesgo en la toma de decisiones en materia de desarrollo.

Pregunta: ¿Cómo cambiamos la narrativa de las proyecciones de riesgo a las vías futuras?

El riesgo debe entenderse como interdependiente y sistémico.

En nuestros esfuerzos por gestionar los riesgos con el fin de apoyar el desarrollo sostenible, a menudo nos centramos en peligros individuales como inundaciones, deslizamientos de tierra o fenómenos me-teorológicos extremos. En un mundo de creciente interconectividad, ya sea entre sectores, países o indi-viduos, los riesgos ya no pueden gestionarse de forma aislada, sino que deben tratarse como un compo-nente inevitable de sistemas complejos e interconectados. Los eventos peligrosos pueden ocurrir simul-táneamente, lo que lleva a consecuencias aún más graves. La pandemia de COVID-19 ilustra estos impac-tos en cascada. A pesar de originarse como una crisis sanitaria, el impacto del virus ha afectado a casi to-dos los sectores, sistemas enteros y sociedades a nivel mundial y ha aumentado las vulnerabilidades en todo el mundo. Los riesgos que se están creando son cada vez más sistémicos y en cascada a través de los sistemas sociales, económicos y ambientales, lo que los hace prácticamente imposibles de abordar re-trospectivamente o de forma aislada a través de los enfoques actuales de reducción del riesgo de desas-tres o el planteamiento de la transversalidad. El creciente nivel de riesgo sistémico se encuentra en el punto en que ahora es una potencial amenaza existencial para el desarrollo socioeconómico actual, y co-mo señala el GAR 2022, el aumento proyectado de los desastres y las pérdidas asociadas no tiene en cuenta los impactos futuros del cambio climático, ni tampoco el riesgo extensivo que representa la mayo-ría de las pérdidas por desastres.

Pregunta: ¿Por qué, frente a un sólido conocimiento científico sobre el riesgo climático y de desastres, y sus causas y consecuencias, la parte fundamental de las políticas nacionales de desarrollo todavía no está persuadida de la necesidad urgente de un desarrollo basado en el riesgo?

La gestión del riesgo de desastres (GRD) no es suficiente: necesitamos transformar nuestras vías de desarrollo hacia un desarrollo basado en el conocimiento del riesgo.

El desarrollo basado en el conocimiento del riesgo (RID, por sus siglas en inglés) es una comprensión del desarrollo que tiene en cuenta los riesgos multifacéticos, dinámicos, interdependientes, transnacionales, simultáneos y sistémicos. Este enfoque basado en el riesgo para la toma de decisiones permite a las so-ciedades prepararse, mitigar y adaptarse al cambiante y complejo panorama de riesgos con el objetivo de fortalecer la resiliencia y salvaguardar el desarrollo de manera sostenible. Por lo tanto, RID describe un cambio de mentalidad, entre sectores y partes interesadas, desde la gestión de peligros individuales has-ta la incorporación de riesgos existentes y futuros en todos los procesos de desarrollo desde el principio y la elección de vías de desarrollo que eviten la creación de nuevos riesgos. Como se destaca en el GAR2011, "el desafío no es proteger el desarrollo (es decir, a través de más GRD), sino utilizarlo para abordar los factores de riesgo subyacentes". RID es un proceso continuo de abordar el riesgo en la toma de decisiones, y nunca descuidarlo.

Pregunta: ¿Por qué asumimos que la reducción del riesgo de desastres podría o debería proteger el actual paradigma de desarrollo que está creando riesgos más rápido de lo que podemos gestionar?

Es fundamental crear capacidades y promover un entorno propicio para tomar decisiones basadas en el conocimiento del riesgo.

La aplicación de enfoques del desarrollo basado en el conocimiento del riesgo también depende de con-diciones favorables, es decir, un entorno propicio para la toma de decisiones basada en el conocimiento del riesgo. Los componentes clave de un entorno propicio incluyen conocimientos e información accesi-bles y viables, políticas y un marco jurídico que guíe y regule la adopción de decisiones, así como el respal-do financiero y las capacidades organizativas necesarias para una aplicación eficaz. Además, la colabora-ción entre diversas partes interesadas y sectores crea un entorno propicio para aumentar los conocimien-tos, evitar el aislamiento de responsabilidades y superar las ambigüedades.

Preguntas: ¿Por qué asumimos que un mejor conocimiento del riesgo desencadenará la acción política y determinará la política? ¿Cómo puede la arquitectura institucional actual apoyar mejor una transición hacia vías de desarrollo más informadas sobre el riesgo?

Fomentar la participación de todos los miembros de la sociedad y abordar sistemáticamente las de-sigualdades son piedras angulares del desarrollo basado en el riesgo.

Los desastres magnifican las desigualdades sociales existentes y perjudican aún más a quienes ya son más vulnerables. La vulnerabilidad varía, por ejemplo, dependiendo de la dinámica de poder estructural, las normas sociales, los roles de género o factores individuales como la ubicación, los ingresos, la edad, la discapacidad, la orientación sexual, el origen étnico, el género, el acceso a los sistemas de protección so-cial, etc. Por lo tanto, la desigualdad es un factor de riesgo que se refiere a las condiciones ambientales y sociales más amplias que limitan a las personas y las comunidades para hacer frente al impacto de los peli-gros y las interconexiones con la mayoría (si no todos) los otros impulsores del riesgo, como la pobreza, el cambio climático, los conflictos, la urbanización o el desplazamiento forzado. Para garantizar un desarrollo basado en el riesgo, deben tenerse en cuenta las perspectivas y necesidades de todos los miembros de la sociedad. Solo capturando diferentes vulnerabilidades y capacidades, se puede identificar toda la gama y complejidad de los riesgos. Además, lo que se considera un riesgo aceptable o inaceptable, o lo que es una estrategia óptima para el desarrollo basado en el conocimiento del riesgo, debe ser informado por los principales portadores del riesgo: las personas afectadas y los actores locales.

Pregunta: ¿Cómo se puede incorporar las voces de los más vulnerables en los procesos nacionales de pla-nificación del desarrollo y toma de decisiones?

No existe un plan universal: desarrollo basado en el conocimiento del riesgo debe adaptarse al contexto con suficiente flexibilidad para reevaluar y adaptarse continuamente.

Cada contexto de desarrollo es diferente y también lo son los riesgos que se manifiestan dentro de un contexto determinado. Las mismas políticas y decisiones que están informadas sobre el riesgo en un con-texto, podrían crear nuevos riesgos en otros contextos. Las interacciones complejas entre las amenazas, la exposición, la vulnerabilidad y las capacidades de afrontamiento, así como el conocimiento sobre ellos, están en constante evolución. A medida que cambian las dinámicas y constelaciones de riesgos, es nece-saria una iteración y reevaluación periódicas. Esto requiere la recopilación continua de información y aprendizaje y, si es necesario, reajustar o revertir las decisiones que ya no son adecuadas dado el cambio en el contexto o el conocimiento disponible. En lugar de trabajar hacia ganancias rápidas o un punto final, RID se trata de trabajar hacia una visión a largo plazo de un futuro habitable, lo que requiere considerar el impacto potencial de las decisiones cotidianas desde una perspectiva de riesgo.

Pregunta: ¿Cómo desarrollamos enfoques regenerativos que conviertan los impulsores del riesgo en facili-tadores del crecimiento sostenible?

La toma de decisiones basada en el riesgo es un requisito previo para el desarrollo sostenible y funda-mental para prevenir la creación de nuevos riesgos.

Cada decisión de desarrollo tiene el potencial de fomentar un desarrollo resiliente y sostenible, pero también está contribuyendo considerablemente a la creación de riesgos nuevos o adicionales. Cuando los procesos de adopción de decisiones no consideran cuidadosamente los riesgos futuros existentes y po-tenciales, pueden socavar el desarrollo sostenible. Por lo tanto, reducir y gestionar los riesgos no solo es fundamental para el logro del Marco de Sendai, sino también de los ODS. En un mundo donde el riesgo es sistémico y cae en cascada a través de los sistemas sociales, económicos y ambientales que son la base del bienestar humano, los desastres no pueden considerarse separados del desarrollo; Los choques y tensiones extremos proporcionan información única sobre las fortalezas y debilidades relativas, las inter-dependencias críticas, los límites y las fronteras que definen nuestro desarrollo. Esta comprensión del riesgo puede apuntar al cambio transformacional requerido para las vías de desarrollo futuras para fo-mentar la resiliencia y garantizar la sostenibilidad a largo plazo.

Pregunta: ¿Cómo incorporamos las consideraciones de riesgo al corazón de la planificación estratégica nacional del desarrollo, particularmente en relación con las estrategias de crecimiento económico y del empleo?